Unas Navidades irresistibles

C171214c8d456be2medon la llegada de las Navidades, sin darnos cuenta, nos vemos envueltos en un ambiente de luces y colores, de notas musicales y delicados detalles decorativos. De exquisiteces varias y dulces tentaciones que nos deleitan la vista y el paladar. ¿Quién se puede resistir a esas copiosas comidas y cenas en familia o entre amigos?

446274-1_ll

Es difícil no embriagarse de ese espíritu alegre y festivo, incluso, resulta imposible resistirse a esas frenéticas sesiones de compras compulsivas, que en el fondo, casi todos odiamos.

Y yo digo… ¿por qué ese empeño en resistirnos?. Estamos cansados de oír que la vida hay que tomarla como viene, con sus alegrías y sus tristezas, con su cal y con su arena. Hoy voy a proponeros la no-resistencia, la rendición a aquello que nos toca vivir. Pues aquello que parece insoportable e irresistible en un momento dado, aquello que no queremos o podemos aceptar por considerarlo injusto, dañino, abusivo o incluso inmoral, no puede cambiarse sin antes haberlo aceptado. Lo que quiero decir es que creo que nunca podríamos transformar una determinada situación de nuestra vida sin que antes nos hayamos rendido a ella y la hayamos permitido ser.

Aceptemos entonces que la vida es irresistible, y desde esa sensación de paz interior, de no resistencia, tendremos menos sufrimiento. Entonces podremos actuar con más conciencia y planificando acciones más certeras hacia el cambio.

Porque aceptación no significa resignación. Porque aceptación no significa inactividad. Porque la aceptación no es incompatible con tomar las acciones necesarias para cambiar una situación. La aceptación lo que nos trae es un sentimiento de sosiego y tranquilidad desde el cual puedo actuar.

thikrdcvivYa están aquí, ya llegaron las Navidades. Y desde hoy os invito a practicar la no-resistencia a lo irresistible que nos traen. Rindámonos a cada momento en familia, poniendo consciencia en el presente, en lo que hay, sin mirar al pasado ni al futuro, sin comparar, ni juzgar ni etiquetar. Rindámonos a las irresistibles y copiosas cenas y comidas navideñas, disfrutándolas con todos nuestros sentidos; ya nos pondremos a dieta por los excesos tras aceptar ese par de kilos que vamos a coger, si es que los cogemos. Dejemos sitio a la ilusión por los regalos que demos y recibamos con sincera generosidad y agradecimiento. Aceptemos también las ausencias, los comentarios, opiniones y gestos de los demás, respetando y sin reaccionar, simplemente respondiendo desde nuestra aceptación.

¡Vivamos este año unas Navidades irresistibles!

Mabú.

 

 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s